Un plebiscito comunal para definir los destinos de SMAPA
Naturalmente no hace falta verificar la importancia que tiene SMAPA para Maipú, pues provee el alimento primario (agua), un elemento indispensable para el día a día de vecinas y vecinos, miles de millones al municipio, ha sido por años un ejemplo para todo municipio nacional, asimismo acapara la atención de la comunidad y especialmente, tal como vemos día a día, de la prensa y los matinales.
No podemos tampoco desconocer la situación de crisis actual, la falta de profesionales idóneos, las miles de fugas de agua potable por las calles, los déficits en los avances de los planes anuales de desarrollo, los millones de pesos perdidos en no pago, la dependencia de Aguas Andinas en el tratamiento de aguas servidas, impuestos internos, la burocracia administrativa, cambio climático, la falta de prospectiva, entre otras.
A esta altura, más allá de diagnósticos de problemas, se esperan propuestas de solución, es así como hace unos meses, abril, a través de este mismo medio y otras instancias, se propusieron una serie de mejoras que apuntaban a la obtención de recursos a través de la preferente relación con el gobierno actual, incluyendo a una ex trabajadora municipal que actualmente dirige la DIPRES (Dirección de Presupuestos de Chile), además de otras iniciativas no tan consideradas, como proyectos de ley que apoyen a las sanitarias municipales (SMAPA) y rurales, reestructuración e inversión en tratamiento de aguas, trabajo en prospectiva, entre otras.
Así el municipio actualmente ha avanzado en dos ámbitos que se encuentran en debate actualmente, el primero la implementación de una glosa en la discusión sobre el presupuesto nacional 2023, que habilitaría a SMAPA a postular a la obtención de fondos frescos en ámbitos donde hoy no es posible, como proyectos de la SUBDERE, eso si, la glosa permanecería con seguridad solo por el año 2023, siendo decisión del gobierno y parlamentarios su vigencia año a año. Además, la glosa solo autoriza un eventual gasto estatal en SMAPA, no atrae aparejado recurso alguno, por lo que ya depende de la gestión municipal el postular y obtener fondos durante el año de vigencia de la glosa, el 2023. Una propuesta que ayuda, claro que sí, pero sigue sin ser una solución de fondo, permanente, que se pueda proyectar en el tiempo.
La segunda es el cambio jurídico-administrativo de SMAPA, que pasaría de ser una dirección municipal (lo que es actualmente) a transformarse en una empresa municipal, donde se busca la independencia financiera de SMAPA del municipio, pues hoy comparten una misma cuenta corriente lo que claramente perjudica a SMAPA, al no poder contar con los recursos que genera directamente, junto a lo anterior, desde el Municipio argumentan que se minimizaría la burocracia administrativa de la Sanitaria, al no tener que pasar por concejo municipal, bajo largos procesos, para definir la realización de cualquier compra relevante, situación que de hecho es muy cierta.
Los detractores del proyecto “Empresa Municipal” argumentan que bajo aquella propuesta, se tiene la opción de facilitar el endeudamiento de SMAPA, lo que estimula, tal como en años anteriores, que SMAPA se sobre endeude a niveles de no poder ser capaz de pagar sus obligaciones, pavimentando así una opción que pudiera potencialmente causar la temida desaparición de la Sanitaria, tampoco podemos desconocer que otras iniciativas municipales a nivel nacional que han buscado desligar direcciones de la burocracia, son las corporaciones municipales, que pueden adquirir deuda, privatizarse, pero ser tremendos fracasos financieros y fuente de pago de favores, existiendo innumerables casos, algunos muy cercanos.
La existencia del debate sobre el futuro de SMAPA, es impostergable y de la misma forma, se hace necesario el planificar espacios de decisión democráticos, pues recordemos que SMAPA nace el año 1950, llevando de esta manera más de 70 años al servicio de la comuna, así cabe preguntarse, ¿ Es legítimo que una administración municipal, a la que le quedan solo 2 años de vigencia, tome la decisión por si sola de cambiar para siempre SMAPA, un patrimonio histórico-cultural de Maipú que lleva décadas de existencia? ¿No será más idóneo que sea la misma ciudadanía que decida el futuro de SMAPA a través de un proceso democrático, participación y voto vinculante?
La legislación actual, específicamente la ley 18695 de Municipalidades nos entrega la alternativa de realizar plebiscitos comunales, donde la gente a través de su voto en un proceso normado y respaldado por el SERVEL puede votar su opción y hacerla vinculante si es que sufraga más de la mitad del padrón, y dentro de las materias a plebiscitar se encuentra cualesquiera de índole municipal, siendo la decisión del futuro de SMAPA parte de ella.
El llamado a la realización de plebiscito puede ser por iniciativa del Alcalde o de la ciudadanía reuniendo firmas con ese fin, y si se quiere realizar bajo el presente gobierno comunal debe ser durante el año 2023, pues la normativa no permite la realización de plebiscitos comunales durante años que se ejecuten elecciones municipales (fijadas para Octubre del año 2024).
Un gobierno comunal que busca profundizar la democracia y participación ciudadana, no se debiera restar de los mecanismos de decisión que fomentan la participación ciudadana vinculante, la legitimidad democrática reside en la gente.